El cocinero, con su mortero en plena picada de ajos |
El cocinero ciezano envuelto en la atmósfera culinaria de su simpática cocina. |
Pero sin duda, la magia de este cocinero "ad libitum" reside en su puesta en escena, en cómo explica aquello que elabora, sazonando las escenas con pinceladas de frivolidad y humor. Todo en su cocina destila un climax de improvisación, y ahí es donde Luis se crece y nos hace partícipes de un entramado a veces un poco caótico; -pero en realidad es lo que nos sucede a todos en nuestras respectivas cocinas.
En YouTube, a Luis le hicieron comentarios despectivos, por haberse tomado una cerveza mientras cocinaba un conejo...¿Qué dirían de estas tres bellezas? |
YouTube no es una "red social", pero como si lo fuera. El personal deja comentarios acerca de los vídeos, y para uno que encontremos con sensatez y positividad nos caen tropecientos exabruptos con mala baba y agresividad, para no perder la costumbre de las mentadas redes sociales. Entre las "perlas" que dejaron a Luis entresaqué esta maravilla: "eres un monstruo como matas a un animal inosente". Lo transcribí tal como fue redactado: sin comas, y con ese "inosente" tan exótico. Este comentario bastante friky se lo dejaron en una receta que trataba de "conejo y patatas al montón con ajo cabañíl", -algo por cierto muy de Murcia y Cieza en particular.
Lo curioso es que a Luis no se le ve matar nada, el conejo ya lo estaba y por tanto el cocinero procede a su elaboración; pero vivimos en la edad de oro de los indignados, de los cabreados por todo, y lo último, lo más de lo más viene de parte de los veganos y animalistas que no están por el personal que come carne. Se sienten justicieros y sólo desean imponer sus gustos o querencias personales, sin respetar al prójimo. Y allí se presentan, en un local especializado en jamones, un burguer, o un restaurante cualquiera y reprenden a aquellos que estén metiéndose en la boca un chuletón, un filete de pollo o cualquier cosa que no sea una lechuga hidrofilizada, tófu, o unos higos con almendras. Estos iluminados fanatizados no saben que todos nos alimentamos de seres vivos que dejaron de serlo. Porque seres vivos son los vegetales y las frutas que comemos. Da igual que sea un tomate, una col, una lechuga; una vez que el agricultor los recoge inmediatamente quedan desconectados de la savia que les alimenta procedente del árbol o la planta. A partir de ahí, comenzará un lento proceso de oxidación y putrefacción al igual que si fueran cadáveres de animales o seres humanos.
Lo maravilloso de todo este fanatismo enfermizo es que desconocen el origen de todo este disparate, y que viene del nacional-socialismo de Hitler, quien abominaba de los que comían carne, adoraba a los perros y se cepilló a millones de judíos en las cámaras de gas...
¿Y qué comentarios harían de esta pobre? |
Receta de "Pipirrana de Cieza", por Luis Ortiz Salles
1 comentario:
No sabía esta faceta tuya "arguinñandil" pero ya puestos en el ajo, Luis creo que esto a lo que te dedicas es digno de estudio. Sigue, sigue...
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