miércoles, 17 de marzo de 2021

JOSÉ MARI MANZANARES, ARTISTA ALICANTINO


 

No encontramos palabras de agradecimiento hacia nuestro compañero Giovanni Tortosa en que, cada semana nos regala su arte mediante un lienzo admirable. De sus pinceles brota su creatividad, sencillamente, la que lleva tantos años cautivando por el mundo. Nosotros, como receptores de su arte no nos queda otra opción que admirarle porque, por el precio del amor, Tortosa, es capaz de extasiarnos semanalmente, un gozo de extrapolamos hacia nuestros lectores que, a no dudar, seguro que lo disfrutan tanto como nosotros.

Barruntamos, tras analizar su pintura que Giovanni Tortosa nos muestra a Manzanares pero, con ese atisbo de crítica que, sin mediar palabra, lo dice todo. Vemos al maestro Manzanares enfrentándose a un toro -por su pinta- de Albaserrada, algo nada habitual en la carrera del maestro pero que, según este lienzo admirable, igual el mismo no deja de ser un recordatorio para el maestro de Alicante para que comprenda que, además de los toros de la casa Domecq, todavía, para gozo de los aficionados quedan toros en las dehesas, justamente de los que emocionan a los aficionados.

Entendemos que, todavía está a tiempo Manzanares de dar una campanada de época y enfrentarse alguna vez en su vida a una corrida encastada como la antes comentada que, de haberlas haylas, es cuestión de buscarlas y, como digo, torearlas y matarlas.

                                                                                        Luis Pla Ventura

 

lunes, 8 de marzo de 2021

ROBERTO DOMÍNGUEZ, TORERO con MAYÚSCULAS.


 

Giovanni Tortosa es un tipo creativo por excelencia, amante de la mejor fiesta del mundo, la que subyugó a escritores de la talla de Ernest Hemingway, pintores como Goya y un elenco de artistas en todas las facetas que, inexorablemente, podríamos decir que se trata de una fiesta cautivadora.

Nuestro compañero, convicto y confeso de las dificultades por la que atraviesa la fiesta en todos los órdenes, no ha dudado un instante en poner su arte al servicio del aficionado y, asumiendo la responsabilidad que le caracteriza como artista, promover esta fiesta inigualable en la que, además de rendir pleitesía al aficionado como icono espléndido para que las corridas de toros tengan su razón de ser, no contento con todo ello, Giovanni se recrea junto al toro y, por ende, junto a los toreros; es decir, con su arte rinde tributo a ese triunvirato que representan el aficionado, el toro y el torero.

Nuestro artista ya podría sentirse satisfecho con la columna o ensayo semanal que nos regala para mostrarnos, como tantas veces dijimos, su faz más creativa en aras de la búsqueda de todo aquello que pueda ser interesante para el aficionado. Hoy, como su lienzo nos muestra, Giovanni se ha recreado nada más y nada menos que con la figura de aquel artista de los setenta que tantas veces nos cautivó; aquel nació en Valladolid para que la ciudad castellana fuera conocida en el mundo entero. Se llama, como no podía ser de otro modo, de Roberto Domínguez, ese artista que nació a la vera del Pisuerga.

Gracias, amigo Giovanni. El karma de la vida de aliará junto a ti para que, en el devenir de los días el éxito sea siempre tu aliado.

                                                                                  Luis Pla Ventura